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Las opciones de entrenamiento virtual están sacudiendo la industria del fitness. Y ahora, estamos empezando a ver cuán disruptivos pueden ser el contenido, el equipo conectado y las aplicaciones de fitness. Lejos de ser una moda, el entrenamiento virtual ha crecido junto con la lucrativa economía del bienestar. Pero en un nivel más fino, un estudio de los hábitos de compra de los consumidores en 2019 revela un cambio claro en el consumo.

La carrera por la digitalización se pone fuerte

Los gimnasios como Planet Fitness atrajeron el 72% del gasto total, los estudios boutique representaron el 22%, y las opciones virtuales, desde Beachbody hasta Peloton, representaron solo el 6% del gasto total en fitness. Si bien el gasto en gimnasios y estudios creció alrededor del 5%, el gasto en acondicionamiento físico virtual aumentó un 59%. Desde 2017, el gasto en acondicionamiento físico virtual ha aumentado un 128%, mientras que los gimnasios tradicionales crecieron solo un 6%. Yendo más profundo: hasta la fecha, los espectadores se han apoyado en anécdotas como «The Netflix of Fitness» para explicar la evolución del espacio. Pero, a medida que el negocio madura, cuantificar el impacto del entrenamiento virtual está ayudando a dar sentido al cambio más amplio.

Para empezar, los consumidores no solo gastan más en aplicaciones de fitness; están aferrados a su suscripción digital por más tiempo que una membresía de gimnasio tradicional.

El negocio esta en hacerlos sudar en casa

La industria del fitness se basa en la ruptura: la idea de que las personas se inscriban en una membresía que nunca usarán. Y, teniendo en cuenta el hecho de que los gimnasios pierden entre el 30 y el 50% de sus miembros cada año, el desgaste es un gran obstáculo para los operadores y los amantes de la actividad física por igual. Por lo tanto, no es sorprendente saber que para el otoño de 2019, los gimnasios y estudios tradicionales perdieron más de las tres cuartas partes de los clientes que se unieron en enero. Mientras tanto, durante el mismo período, las aplicaciones de fitness on-demad retuvieron a casi la mitad de los usuarios que se inscribieron para comenzar el año.

Es de destacar que estos números no nos dicen quién realmente se apegó a su hábito de entrenamiento, sino quién todavía lo estaba pagando. Hablando de gasto, el entrenamiento virtual está demostrando ser menos costoso que otras opciones. Mientras que los amantes del entrenamiento gastan alrededor de $136 por mes y los miembros del gimnasio gastan $59, los usuarios digitales de fitness gastan alrededor de $48 por mes. Dicho de otra manera, los asistentes a gimnasios gastan casi el doble de lo que pagan los suscriptores que usan herramientas de entrenamiento virtual

Pero el precio es solo una pieza del rompecabezas. Si la experiencia y los servicios de alta gama son fundamentales para la propuesta de valor de fitness boutique, el acceso y la comodidad diferencian las opciones virtuales. Desde Aaptiv a Fitbod y SWEAT a Freeletics, los usuarios están dispuestos a pagar $10 a $20 al mes, además pueden hacer ejercicio donde y cuando quieran. Las ventajas adicionales como el entrenamiento personalizado y las asesorias nutricionales endulzan el trato. Sin mencionar el hecho de que, a diferencia de un gimnasio tradicional en el que estás solo, estas aplicaciones están diseñadas para el compromiso y optimizadas para obtener resultados.

Rompiendo esquemas: Peloton vs. Soulcycle


Según Earnest Research, SoulCycle experimentó una caída del 30% en las ventas en Estados Unidos. Entre la última semana de diciembre y las primeras semanas de enero: es la mayor disminución de ventas de un año a otro registrada.

Mientras tanto, como supimos durante el segundo trimestre de la semana pasada, Peloton llegó a 712K suscriptores activos, un aumento de 96% año tras año. Ahora, la compañía espera terminar el año con más de 900,000 suscriptores activos y ingresos por encima de los $1.5B. Para empeorar las cosas para SoulCycle, cada vez más ciclistas están dando una vuelta a Peloton. A diciembre, el 9% de los clientes de SoulCycle realizó una compra con Peloton durante los seis meses anteriores. Por otro lado, solo el 2% de los clientes de Peloton realizó transacciones con Soul durante ese mismo período de tiempo.

Lejos de ser definitivo, estos datos demuestran cuán receptivos pueden ser los asistentes al estudio a las opciones conectadas y bajo demanda. A medida que la lista de ofertas digitales crece y los líderes de categoría como Peloton convierten más desertores, no es difícil ver cómo las ofertas digitales continúan capturando participación de mercado. Mirando hacia el futuro. Por supuesto, reducir la cuota de mercado es diferente al colapso total de la sudoración en la vida real. En realidad, la evolución del panorama del fitness está creando más oportunidades, no menos. Y en el futuro, esa oportunidad demostrará estar más fragmentada que nunca.

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